Esta acción de los ácidos grasos naturales se siente a nivel celular y contribuye al proceso de regeneración de la piel seca y arrugada y puede usarse para tratar el reumatismo y los músculos doloridos.

Sus propiedades drenantes y antiinflamatorias ayudan a drenar las toxinas de los músculos doloridos: perfecto para los deportistas, es calmante en esguinces y distensiones, y es un tratamiento antiartrítico ampliamente utilizado.

Fortalece las cutículas y las uñas: ayuda a curar los moretones. Ayuda a prevenir la irritación de la piel de los bebés: utilizado durante generaciones para ayudar a los bebés a dormir mejor. Úselo después del afeitado para prevenir la irritación y restaurar el brillo natural de la piel. Ideal para pieles secas, dermatitis, eccemas, quemaduras solares y pie de atleta. Rejuvenece los poros de la piel y añade elasticidad a la piel. Reafirma la piel envejecida y ayuda a eliminar las arrugas. Masajee la manteca de karité en las áreas afectadas por artritis, dolores articulares u otros dolores musculares.

Ingredientes:

Agua desionizada purificada, aceite de girasol orgánico, aceite de coco, manteca de karité, cera emulsionante NF, ácido esteárico, glicerina vegetal kosher, aceite de aguacate, triglicéridos caprílico/cáprico, etilhexilglicerina, fenoxietanol, vitamina E